Desde mi punto de vista, debería escribirse un libro sobre gestión empresarial y planeamiento a largo plazo que tome como eje central el Universo Cinematográfico de Marvel desde el año 2005 hasta el año 2019.
No quiero que un estudiante sepa que super-poder tiene tal o cual personaje. Sino que este caso de estudio permite analizar como una empresa tomo ideas de los comics originales de más de 40 años y las uso para contrarrestar una mala decisión del año 2005 al licenciar ciertas franquicias de personajes y arcos históricos a otros estudios. Como a partir del año 2008, pudieron plantear una trama general dividida en 21 películas, 7 series de televisión de varias temporadas cada una, y (por ahora) 5 cortos que solo salieron como extras en los blu-ray; pero manteniendo la individualidad de cada proyecto. De esta manera hicieron que se pueda ver solo una película o una serie disfrutándola plenamente, y a su vez todas las partes contribuyen a la historia principal. Un rompecabezas de más de 30 piezas, en el cual cada pieza es una obra en si misma.
Este gran proyecto va a concluir en el año 2019, once años después de haber comenzado, y recién ahi va a poder ser analizado economicamente por completo. Pero por ahora viene siendo bastante exitoso, habiendo conseguido posicionar a una de sus películas, The Avenger, como el tercer largometraje con mayor recaudación en la historia.
Pero más allá del resultado monetario, hay muchas otras aristas relacionadas con la gestión del proyecto que pueden ser estudiadas. Por ejemplo la decisión de hacer algunos de los contratos más largos de la industria cinematográfica. Entre estos el de Samuel L. Jackson, quien firmó para participar en como mínimo 9 películas.
Otra cosa que me llama la atención es como lograron vincular a todos los directores de las películas a la cultura empresarial e impartir en ellos la visión amplia de todo el proyecto, logrando que estos estén dispuestos a incorporar a cada guión ciertas escenas o “easter eggs” que vinculan a todas con la historia general. Así también, es llamativo como Marvel contrato a Joss Whedon, director de The Avengers, última entrega de la primer etapa de este largo plan, para que sea el consultor creativo en todos los proyectos de la segunda etapa. De esta manera lo involucran creativamente en más de 10 proyectos entre películas y series, que en su mayoría son dirigidas principalmente por otros directores. Todo esto es una receta para el éxito, o para el fracaso rotundo.
Además es notable como superaron el desafío de tener que reemplazar a Edward Norton por Mark Ruffalo para interpretar el papel de Hulk sin perder la continuidad ni la esencia del personaje. Es más, este cambio fue altamente apreciado por los fanáticos ya que Ruffalo fue un casting más acertado para interpretar ese papel.
Una gran incógnita que se presenta es como harán para incorporar o suplantar a Spiderman, personaje licenciado hasta después del 2020 a Columbia Pictures en la película sobre Civil War. El papel de este súper héroe es fundamental en la trama de esa película y hay rumores que dicen que Marvel hará una alianza con Columbia para poder utilizar su imagen. Si esto se llega a cumplir será una movida enorme al aliar dos empresas competidoras en un proyecto común.
Todavía queda mucho por ver y Marvel tiene muchos más desafíos que superar para que toda esta gigantesca movida alcance los niveles que ellos y el público esperan. Para saber como es el resultado de esta gran jugada hay que esperar 5 años más, pero si al finalizar alguien decide escribir un libro al respecto, yo definitivamente lo leería y lo recomendaría.
Nicolás Cravetz 